“Los hay de leche de vaca, oveja, cabra, incluso búfalo y camello; los hay frescos, madurados, tiernos, curados, pasteurizados; los hay cremosos, arenosos, mantecosos, duros; los hay suaves, fuertes, dulces, ácidos, picantes; los hay con corteza y sin corteza, grasos y magros. Se puede tomar solo o como acompañamiento. Con pan, miel, vino y otras bebidas. En el desayuno, entre horas, de aperitivo, a los postres. A trozos, rallado, fundido, gratinado. Forma parte de un sinfín de recetas, de platos tradicionales y vanguardistas…”
Así comienza nuestro primer artículo en la Guía Hedonista, el espacio gastronómico de Valencia Plaza, ya una referencia en el sector. La primera entrega de una colaboración mensual para, básicamente, hablar de queso. De queso artesanal, con personalidad, con rostro, con alma. Para que los lectores redescubran el queso.
Presentimos que esto es el comienzo de una fructifera amistad…